A veces nos resulta muy difícil tener una visión realmente abarcativa de los grandes sistemas que condicionan el diario vivir de la gente. La misma lucha por las cuestiones inmediatas, las diarias, pueden llevarnos a perder de vista el gran diseño.
Es como enojarnos con el indefenso e ignorar las grandes fuerzas que operan fuera de nuestra consideración.
Hace algunos años me explicaron el caso de esos animalitos monotermos que toman la temperatura del ambiente que les rodea. Me explicaron, entonces, que si ponemos una rana en agua fría y la calentamos lentamente, el batracio terminará hervido y muerto sin haber podido reaccionar. Por favor no hagan esto en sus casas porque es extremadamente cruel.
Tal vez nos pasa algo así a nosotros, siendo sometidos de forma inconsciente a presiones y caprichosas temperaturas sociales.
Hay quienes deben pagar por la aburrida tranquilidad de otros...
Si las nefastas reglas que subyacen se hicieran manifiestas en forma de objetos simbólicos; si de repente aquello que sabemos y nos avergüenza adquiriera sustancia como una inmensa arquitectura ¿Movilidad social?...¿o el palo enjabonado?
Mantener el sistema...Ciertos dispositivos,creados originalmentecon un pretendido fin altruista,no hacen otra cosa que colaborarpara mantener una realidadsin cambios o, a lo sumo,atender mínimas
cuestiones cosméticas(nada de fondo).
Las carencias arraigadas en ciertas zonas pueden expresarse a mucha distancia, en ocasiones tomando la forma de una extraña abundancia.
Si pudiéramos ver lo que se esconde detrás de esto, la perplejidad nos paralizaría...
¿Cómo llegó todo esto a ser?..., quizás como las piedras de aquellas pirámides,...
Tengo el agrado de compartir con ustedes mi última colección de obras bajo la temática general que denominé "Injusta Balanza".
A continuación comparto el video introductorio donde se pueden apreciar las diez obras que componen la muestra.
Espero que sea de vuestro agrado y desde ya agradezco el tiempo que me han dispensado.
"Lo poco que queda es azotado permanentemente por ese viento áspero que parece seguir transportando el recuerdo de las explosiones.
La naturaleza no logra despertar aún de su sueño mortal. La planicie desértica es apenas interrumpida por el mover de unos pocos pastos secos.
Somos muy pocos, y puedo asegurar que de aquellas absurdas competencias de egos ya no hay nada (y si lo hay, no tenemos tiempo para practicar eso)."
Link del PDF: https://drive.google.com/file/d/1ArGYeVtm7ZuexTgVJ_j3pgMoytJqM9oC/view?usp=sharing
